Es verdad que siempre y en todo momento tienes que esforzarte a fin de que las cartas duren lo máximo viable, pero no por un buen tiempo y bajo cualquier situación, recuerda, al final de cuenta, es papel y en algún momento se terminará echando a perder.
Tú mismo has de saber cuándo se puede proseguir empleando una baraja con relación a otra baraja que es novedosa, puesto que complicará alguna técnica y el manejo es diferente a en el momento en que una baraja es novedosa.
Desplegar y achatar
Cuando haya decidido su procedimiento de organización, es hora de llevar a cabo un trabajo de conservación. Quizás haya escuchado la palabra «preservación» antes y no esté segurísimo de lo que significa. Significa «tomar medidas para eludir el deterioro o la pérdida», según el Glosario de términos de la Sociedad Estadounidense de Archivistas.
Como archivista, el interrogante número uno que recibo de los genealogistas tratándose de viejas cartas familiares es: «¿Debo dejar la carta en el sobre o sacarla?» Mi contestación es siempre y en todo momento exactamente la misma: sacar las cartas de los sobres.
De qué forma acrecentar las cartas del Tarot
Más allá de que todos y cada uno de los mazos distribuyen elementos generalmente, tener uno se transforma en una parte de lo que eres, en tanto que absorbe tu energía. Una manera de cargarlos es dejarlos toda la noche a la luz de la luna.
Otro trámite es ponerlos en el centro de una candela encendida, un vaso de agua, algo de incienso y una piedra; Estos elementos representan los 4 elementos.
2º Funda recia de plástico
Tras poner nuestras cartas preferidas en las fundas finas mentadas previamente, el próximo paso sería ponerlas en fundas de plástico pero, en esta ocasión, considerablemente más bien difíciles. Estas fundas son un tanto mucho más caras, si bien son indispensables si deseamos resguardarlas de los golpes. cien de estas cubiertas se tienen la posibilidad de hallar en Amazon por un precio de $29.29 aquí.
De qué forma consagrar una baraja
El último paso es consagrar las cartas. Esto quiere decir proporcionarles un propósito y asimismo imbuir su esencia. Toma las cartas y medita sobre el propósito que tienes con ellas, qué deseas que hagan y cuál es su destino.
Tienes que dedicar una oración a tu espíritu guía o, en su defecto, a un ángel o ser superior que sea tu devoción. Tras decir la oración, afirme en voz alta oraciones pidiendo las cartas para contribuir a otros a conseguir paz y consuelo.