Se reconocen pues relucen, aun sin oro ni purpurina; huelen bien, son agradables, frescos, naturales, juveniles, si bien tengan varios años y sean rápidos; y son muy mundanos; pues en el momento en que un hada está aquí, viene a gozar de su cuerpo, de la tierra y de su encarnación.
Marcelo Javier Neira Navarro
Para Javiera y Agustina
cuentos de hadas
En el momento en que charlamos de cuentos, asimismo tenemos la posibilidad de nombrar esos que tratan de prácticas, o esos protagonizados por animales, que poseen una enorme moraleja: las fábulas.
Pero, centrándonos en los cuentos de hadas, hablamos a cuentos espectaculares, de origen habitual y connotación fatua, transmitidos y heredados de la tradición oral y reescritos desde el siglo XVII, con elementos fabulosos, seres sobrenaturales y, más que nada, de la temporada, con un héroe personaje principal, inmerso en una narrativa atemporal anotada en un planeta abstracto (Nobile, 2006:50).
Hadas
Las hadas son gráciles criaturas fabulosas propias de la mitología europea, singularmente del folclore celta, inglés, eslavo, alemán y francés. Según estas tradiciones, son seres protectores de la naturaleza y están vinculados con duendes, gnomos, duendes, dioses, sirenas y colosales.
En la mitología grecorromana se les conoce como hadas. Los mitos sobre las hadas tienen orígenes diversos basados en opiniones populares de distintas fuentes, desde ángeles caídos o diablos de la tradición cristiana hasta espíritus de los fallecidos, dioses inferiores de los paganos y antepasados de los humanos.
¿Hay las hadas?
Muchas teorías aseguran que las hadas son considerablemente más que una fácil creencia fundamentada en cuentos mitológicos, aun hay algunas patentizas que prueban la presencia de las hadas. Pese a lo complejo que puede ser para estos seres mágicos entablar comunicación con los humanos, en ciertos casos han logrado detallar conexiones sentimentales con los humanos. Ciertos especialistas en hadas comentan que las hadas hay como humanos que han quedado atrapados en la dimensión mágica de las hadas, o aun que es viable encarnar hadas en humanos.
Exactamente la misma las hadas y los elfos, diríase que los elfos viven en una dimensión paralela a la nuestra y tienen la posibilidad de, ocasionalmente, mantenerse cerca de los humanos. Su peculiar forma de ocultar elementos o jugar con ellos es una manera de detectar su cercanía en esta dimensión. Si bien para bastantes logren ser historias fatuas, para bastantes estos seres verdaderamente hay y representan un factor mágico de la naturaleza.