Los siete diablos, señores de los errores capitales (lujuria, pereza, furia, codicia, soberbia, gula y envidia) reciben la misión de descender a la Tierra para tentar, según su especialidad, a la gente de pura virtud.
A lo largo de varios años las historias nos contaron que en un comienzo era el bien y como resultado nació el mal, unos aseguran que o sea prueba de la presencia de Dios, otros mucho más bien dicen todo lo opuesto, pero lo que sí entendemos es que los diablos han existido en muchas etnias representando los peores defectos de la raza humana. El día de hoy te alcanzamos su origen (historia), sus atributos y los 7 príncipes del infierno.
Como dicen, los diablos en un inicio eran ángeles con exactamente los mismos atributos que el resto, pero dicen por varios teólogos que Dios aprobó a estos ángeles, les mencionó que debían venerar la futura encarnación de su divino hijo y que lo alabaran, pero Luzbel (Lucifer), en su soberbia y soberbia, rehusó y se sublevó contra Dios por no admitir que su hijo reencarnase en una criatura mucho más inferior a ellos, pero no fue el único, sino más bien otros ángeles. se unió a su causa (diríase que son una tercer parte del total), «no serviré» (Jer. 2, 20). “Voy a ser igual al Altísimo” (Is. 14, 14), pero el arcángel Miguel se opuso a los proyectos de Lucifer y lanzó un grito de amor y lealtad: ¿Quién como Dios?
¿De qué forma se los conoce como los 7 diablos mucho más poderosos?
Los siete diablos mucho más poderosos son Abaddon, Asmodeo, Beelzebub, Leviathan, Mammon, Belial y Lucifer. Estos espíritus malvados se hablan de en múltiples fuentes, incluyendo la Biblia, el Talmud y el Corán. Todos estos diablos tiene un papel concreto en el Infierno, y todos tienen un enorme poder sobre los humanos.
Abaddon es el ángel de la desaparición, y su nombre significa «destrucción». Asmodeus es el demonio de la lujuria y su nombre significa «impuro». Beelzebub es el demonio de la orgía, y su nombre significa «maligno». Leviatán es el monstruo marino y su nombre significa «envolvente». Mammon es el demonio de la avaricia, y su nombre significa «avaro». Belial es el demonio de la rebelión y su nombre significa «maldito». Lucifer es el ángel caído, y su nombre significa «portador de luz».
Mamón, el llamado hijo del demonio
Este demonio representa el pecado de la avaricia, en resumen, el cariño a los elementos materiales, incluyendo la riqueza. Según la mitología, este demonio nos avizora desde una gruta donde está su riqueza amontonada.
Este es un demonio que radica bajo el agua teniendo a cualquier persona que se atreva a hundirse. Es bien difícil devolver a la víctima a sus sentidos.
¿De qué manera se los conoce como los 7 diablos?
Los siete diablos, organizados según su papel en los episodios de la obra, son:
- Lucifer: soberbia (capítulo 2)
- Mamón: avaricia ( capítulo 4)
- Leviatán: envidia (capítulo 6)
- Belcebú: gula (capítulo 8)
- Satanás: furia (capítulo diez)
- Asmodeo: lujuria (capítulo 12)
- Belfegor: pereza (capítulo 14)
Beelzebub, el demonio de la gula
De los 7 diablos de los errores capitales, el de la gula es el único que procuró confrontar a satanás, si bien no lo logró. Beelzebub deriva etimológicamente de Ba’al Svuv, que significa señor de las moscas. Nombre que aparentemente empleaban los hebreos para burlarse de las ofrendas de carne de los idólatras que se pudrían y se llenaban de moscas. Beelzebub en su físico toma distintas formas. En ciertos casos, se le detalla como un personaje enorme, de cara gordita y coronado con una cinta de fuego, peludo y con alas de murciélago. En otros, no obstante, lo describen como un hombre con tres cabezas (un hombre, un gato y una rana) y con largas patas de araña. Otros historiadores piensan que su nombre es de todos modos: «señor de la enorme morada».
Amon se considera de los mejores diablos, el que tiene la aptitud de dirigir 40 legiones de diablos. Asimismo se conoce que no hay una alusión directa a la Biblia y que no está clarísimo el porqué de su relación con la furia. Este demonio está relacionado con el saber del pasado y del futuro. Es el único de los 7 diablos capitales que se inspiró en entre los dioses del Viejo Egipto. Asimismo diríase que Amon es un hombre con cara de lobo y cola de serpiente que echa fuego por la boca. Se le atribuyen los actos de homicidio, agresión, discriminación y asesinato en masa.