Definición. Atenea era la diosa de la sabiduría, la guerra y los negocios, y la hija predilecta de Zeus. Ella era, quizás, la mucho más sabia, la mucho más intrépido y, naturalmente, la mucho más ingeniosa de los dioses olímpicos.
Todos hemos oído charlar de la expresión manzana de la discordia, y si bien varios suponen que tiene su origen en la conocida manzana de la Biblia, debemos decir que no. . El de la Biblia hace referencia al pecado original y el nuestro es considerablemente más banal.
Artemisa (Diana para los romanos)
Normalmente se representa a Artemisa portando un arco y flechas.
En la tradición griega, Artemisa o Artemisa, asimismo llamada Delia, era una diosa virginal fundamental, cuyo culto se extendió por toda Grecia, en especial en la isla de Delos, donde se afirmaba que había venido al planeta, tal como en Braurón, Muniquia y Esparta.
Artemisa y las gemelas Aloadas
Otto y Efialtes eran hermanos gemelos, que solo podían fallecer si se mataban entre ellos. Eran geniales cazadores y han comenzado a cortejar a 2 diosas; Otto para Artemisa y Efialtes para Hera.
Artemisa se transformó en cierva en pos de los gemelos y los caminos se cruzaron entre ellos. Los hermanos lanzaron sus lanzas a eso que pensaban que era una cierva en el instante de atravesar y Artemis se dio la vuelta matándose entre ellos.
Atenea
En la mitología griega, Atenea era la hija de Zeus y diosa de la guerra, la justicia, la sabiduría y la ciencia. En verdad, si bien de forma frecuente se la asocia con una guerrera valeroso, su nombre significa «la que tiene un conocimiento profundo», lo que la hace idónea para los progenitores que desean que sus hijas desarrollen sabiduría, talento y talento. Ciertas de sus variaciones, del mismo modo preciosas y auténticos, son: Athena, Athie y Athene.
Considerada la diosa de la Tierra, asimismo era famosa en la civilización griega como Madre Tierra o Madre de los Dioses. Cuenta la historia de historia legendaria que Gaia nació del caos en los comienzos de la creación y, en consecuencia, fue reverenciada entre los fatales por su aptitud para hacer vida en todo cuanto tocaba. Su nombre era homónimo de promesa y también ilusión, al tiempo que antes se relacionaba con la aptitud de comprender y entender. El nombre procede del latín «Gea» y ciertas de sus variaciones mucho más populares son Gaya.