Odoacro, rey de los hérulos, derroca al último emperador de Roma, Rómulo Augusto, el 4 de septiembre de 476. Este hecho marca el objetivo del Imperio De roma: el imperio occidental desaparece al paso que el imperio bizantino oriental sigue con vida hasta la caída de Constantinopla, en 1453.
El curso del imperio – Destrucción, Thomas Cole, 1836.
El 4 de septiembre, el último emperador Rómulo Augusto, aún joven, fue depuesto por el general salvaje Odoacro. Entonces, de un día para otro, el Imperio De roma Occidental desapareció.
El homicidio de César y el comienzo del Imperio
Tanto para el desenlace de la República para el comienzo del Imperio, Julio César jugó un papel primordial. Sus acciones enseñaron a los romanos una cosa muy dañina: un ejército poderoso era bastante para tomar el poder. Con ella se transformarán radicalmente los cimientos de la República, donde el pueblo elegía a sus mandatarios y participaba en la política. Por lo menos en la práctica. Ya que bien, el Senado prosiguió estando, pero su función era únicamente la de asesor del Emperador y nexo con las fundaciones y orígenes de Roma. Se puede decir que era una justificación del emperador, para realizar de su orden algo digno y acorde con las tradiciones romanas. Algo que se veía bien, pero que en el instante de la realidad era únicamente una testera.
El homicidio de César pretendía regresar a la República y tuvo el efecto opuesto. Estableció un campo de guerra para sus probables sucesores. Su hijo adoptivo, Augusto, se encaró a Marco Antonio en la tercera guerra civil romana y, con su victoria, se transformó en emperador. De esta forma empezó el Imperio.
Caída del comercio
El comercio asimismo se vio muy perjudicado. La economía romana dependía en buena medida del comercio interior, tanto por mar como por tierra. El comercio de roma tuvo tanto peso y fue tan activo que, en el momento en que cayó, solo se recobraron sus escenarios varios siglos después.
La moneda fue definitiva en todas y cada una estas transferencias, en tanto que dejó transferencias mucho más visibles, fáciles y veloces. Con consecutivas devaluaciones, el comercio empezó a padecer y cayó de enorme manera. Esto asimismo afectó a las factorías y la producción. La industria no logró poner sus modelos en el mercado.