17 El Espíritu enserio, a quien el planeta no puede recibir, pues no le ve ni le conoce; pero nosotros le conocéis, pues mora con nosotros y va a estar en nosotros.
En ese instante, Jesús ha dicho a sus acólitos:
«Si me amáis, guardad mis mandamientos. Y solicitaré al Padre que les dé otro Paráclito, que está siempre y en todo momento con nosotros, el Espíritu de la realidad. El planeta no puede recibirlo, pues. no lo ve ni lo conoce; tú, en cambio, conócelo, pues mora contigo y está en ti. No les voy a dejar huérfanos, volveré a nosotros. Próximamente el planeta no me va a ver, pero tú me vas a ver y vas a vivir, por el hecho de que yo prosigo viviendo. Entonces vais a saber que yo estoy en mi Padre, nosotros en mí y yo en nosotros. El que admite mis mandamientos y los almacena, ese me quiere; y el que me quiere va a ser amado por mi Padre, y yo asimismo le amaré y me manifestaré a él”. palabra del Señor.
La relación indivisible entre padre y también hijo
Tras enseñarle el sendero a la vivienda de su padre, Tomás se marcha y en este momento Felipe hablará con el Señor. Felipe probó ser algo desinformado o aun inocente de las declaraciones precedentes de Jesús. El Señor expuso precisamente el nivel de su relación con el padre para decir que saber al hijo asimismo significa saber a Dios, que de otra forma sería inalcanzable. Así sea por ignorancia o por inocencia, Felipe le dio a Jesús la posibilidad de argumentar aún mucho más precisamente su relación con su padre. Felipe le solicitó: «Señor, muéstranos al Padre y va a bastar» (v. 8).
Jesús responde a la solicitud de Felipe exponiendo una verdad que es continua en el Evangelio de Juan: la relación indivisible entre el hijo y el padre. En 1:18, Juan afirma: «Absolutamente nadie vió nunca a Dios, el Dios unigénito, que está en el seno del Padre, que se revela a sí mismo». En 5:36 podemos encontrar a Jesús diciendo: “Yo tengo mayor testimonio que Juan; las proyectos que el Padre me dió para llevar a cabo, y que hago, son testimonio de que el Padre me ha enviado.” A las 8.38 afirma: «Les digo lo que vi en presencia del padre». diez,15, afirma, “tal como el padre me conoce y yo conozco al padre; y da su historia por las ovejas.” A las diez:30: «Yo y el Padre uno somos». En diez,38: «a fin de que sepan y comprendan que el Padre está en mí y yo en el Padre». 16.15: «Todo cuanto es del padre es mío». A las 16.28: «Él vino del padre y entró en el planeta; en este momento dejo el planeta y vuelvo al padre». En 17,11: «Padre beato, guárdalos en tu nombre, el nombre que me has dado, a fin de que sean uno, como nosotros somos uno». Y también 17,21: «Padre, que todos sean uno, como en y y yo en ti». Aquí, se le dio una plétora de contenidos escritos solo en el Evangelio de Juan, que el Señor podría emplear para recordarle a Felipe que conocía al padre y, por ende, su pedido.
Contexto y Reflexión sobre Juan 14,1-6
En este pasaje de la Palabra, el Señor Jesús empieza animando a sus acólitos, ya que ahora sabía que la hora del padecimiento en la cruz se aproximaba y que se verían muy damnificados (Jn 14,1). Los acólitos, por su lado, no comprendían lo que pasaba, con lo que se hallaron en una situación de confusión y tristeza, sin poder comprender de qué manera, tras caminar a lo largo de tres años con su profesor, en este momento les afirmaba que se iba. , pero que entonces volvería (Juan 14:3).
La situación dejó a los acólitos en la indecisión y el temor. Bueno, reflexionaron, de qué forma era viable que su amigo y guía espiritual los dejase en paz. Pero el Señor Jesucristo, para confirmarlos y guiarlos, ha dicho: “Nosotros ahora conocéis el Sendero” (Jn 14,4). Entonces, un hombre tan escéptico como Tomás preguntó: «¿De qué forma, entonces, tenemos la posibilidad de entender el Sendero?» (Juan 14:5). Así se incorporó a la palabra la contestación que dio el Señor Jesucristo y quizás entre los pasajes mucho más esenciales de la Biblia en el momento en que ha dicho:
Serie de sermones: Dios, el Espíritu Santurrón
- El papel del Espíritu: asistirnos a conocer a Jesús
- La identidad del Espíritu: un individuo que es Dios
- La obra del Espíritu: de principio a fin
- La definición del Espíritu
Escritura: Juan 14:16-17