Este desarrollo de ‘curación’ hace un ‘viaje espiritual’ de entre 15 y 20 minutos que puede ocasionar alucinaciones, taquicardia, pérdida del conocimiento y a veces la desaparición.
(CNN) — Tan sabroso como suena, tienes que eludir relamer el sapo del desierto de Sonora, advirtió el Servicio de Parques Nacionales (NPS) de EE. UU.
Los peligros de la proliferación de liturgias de DMT
A pesar de que los psicodélicos no son viciosos, Ortiz apuntó que el 5-MeO-DMT tiene un fenómeno popular como ‘reactivación’: vivencias transitorias que tienen la gente tras días, semanas, meses e inclusive años de consumo de substancias. Y sucede que, a veces, quien lo consume siente que está volviendo a ingresar en esta experiencia mística y es muy placentero, pero si se regresa recurrente puede ocasionar ansiedad y falta de sueño.
Además de esto, los psicodélicos incrementan la presión arterial, con lo que en todos y cada uno de los procesos científicos se escoge quién es conveniente. Pero “en el planeta de las liturgias de la rana, uno es conveniente si tiene el dinero que solicita el facilitador”, explicó la sicóloga quien alertó sobre la carencia de protocolos en estas prácticas que se efectúan en el desierto mexicano.
Efectos de Bufo Alvarius y 5-MeO-DMT
5-MeO-DMT y bufotenina son poderosos enteógenos naturales. Los efectos se muestran entre 5 y diez segundos tras fumar el veneno vaporizado, generando una experiencia enteogénica intensa (en ocasiones trascendente). Si bien acaba en unos 30 a 40 minutos, la gente describen haber experimentado un poderoso colapso del ego que de forma frecuente lleva a una sensación de estar conectado con todo cuanto existe. Los efectos de fumar lechuzas venenosas acostumbran a perdurar de 15 a 20 minutos y desaparecen completamente tras unos 40 minutos.
El resplandor psicodélico frecuente puede perdurar unas horas mucho más, y ciertos aseguran que se puede sentir a lo largo de días o semanas tras la sesión.
La dosis de 5Meo-DMT
La experiencia puede cambiar con relación a la proporción de humo que tus pulmones te dejan aspirar. Si fumas de 20 a 30 miligramos, tu experiencia va a ser dinámica: puedes ser un tanto siendo consciente de que andas aquí y en este momento y no llevar a cabo un viaje total, si bien ahora empezarás a conocer colores y fractales.
Tras 50 miligramos entras en un viaje psicodélico y andas totalmente en la experiencia. Con 70 miligramos por el momento no hay control: andas fuera de ti, tu ego se disuelve y entras en lo que tiene por nombre un estado enteogénico, en el momento en que te conectas de forma directa con Dios.