La consanguinidad incrementa las opciones de trasmitir algunos géneros de anomalías de la salud hereditarias a la próxima generación. Hay un conjunto de patologías genéticas que tienen un género de herencia llamada autosómica regresiva.
Hacer descendencia sin espermatozoides
La reproducción sexual implica a una hembra y un macho, todos los que contribuye material genético con apariencia de óvulos o espermatozoides, para hacer descendencia. La enorme mayoría de las especies animales se reproducen sexualmente, pero las hembras de ciertas especies tienen la capacidad de generar huevos que poseen todo el material genético preciso para la reproducción.
Las hembras de estas especies, dentro ciertas avispas, crustáceos y lagartijas, se reproducen únicamente por partenogénesis y se nombran partenogenias obligadas.
Gorila de montaña
Múltiples especies de primates son endogámicas, entre ellas un gorila de montaña –fotografía que abre este producto– que cambió su forma de reproducirse para eludir la extinción de la clase. Esta situación concreto llama la atención de los estudiosos, quienes comprobaron que la población aumentó merced al apareamiento entre integrantes de una misma familia.
Recientemente mucho más de tres décadas quedaban en África 250 ejemplares de gorilas de montaña; el número de muertes por caza, guerra o deforestación era alarmante. Estos primates estaban al filo de la extinción.
Alelos dominantes y regresivos
Si bien aún no se conocían en ese instante, estos aspectos dependían de un solo gen, y los genes causantes de los aspectos (color y rugosidad) estaban muy separados, con lo que se difundieron de manera sin dependencia.
Merced a los entendimientos recientes de genética, entendemos que lo que Mendel descubrió fue la diferencia entre alelos dominantes y regresivos. Los observaremos en aspecto mucho más adelante.