Saltar al contenido

Qué son los principados y potestades según la Biblia

La mención de principados y potestades y huestes espirituales del mal en las zonas divinos se toma comúnmente como una alusión a una guerra contra tropas de diablos, o sea, teóricos ángeles caídos.

Los que leen precavidos de la Biblia podrían preguntarse qué ocurrió entre Malaquías y Mateo. El Viejo Testamento acaba con el pueblo de Dios que termina de regresar a su tierra palestina. Charlan y escriben el idioma hebreo en un planeta gobernado por los persas. Pasando la página del Nuevo Testamento, observamos a exactamente la misma gente todavía en Palestina, pero en este momento el idioma que charlan y escriben es el heleno, no el hebreo, y los romanos, no los persas, están a cargo. Entre los Testamentos, el centro de la civilización se desplazó del valle del Tigris-Éufrates al Mediterráneo. Entender este cambio es entender el planeta en el que se estableció la Iglesia del primer siglo.

El idioma heleno y las maneras de meditar que lo acompañaban eran una herencia directa de Alejandro III de Macedonia. Alejandro salió de Grecia en el 335 a. C. para quitar Asia a los persas. Su campaña lo llevó al radical este del Mediterráneo, venciendo a los persas en Issus y después sitiando Tiro y Gaza durante la costa. Josefo nos comunica que fue en esta etapa de su campaña, en el 332 a.C. C., que Alejandro llegó a Jerusalén. Allí honró al supremo pontifice y reconoció al Dios de ese sacerdote como el que le dio la victoria sobre los persas. En el momento en que a Alejandro se le presentó la profecía de Daniel de que los helenos derrotarían al Imperio persa, él pensó que él mismo era el cumplimiento de esa profecía y dio favores a los judíos.

Cristo despojó a los principados y potestades

La extraordinaria novedad es que con Cristo nuestra victoria está asegurada, Cristo despojó a los principados y potestades y los expuso públicamente al desprecio (Colosenses 2:15), triunfando sobre estos poderes malvados en la cruz. El resultado de o sea que nada nos puede dividir del amor de Dios que es en Cristo Jesús (Rom. 8:38).

Pablo enseña en el capítulo 3 de Colosenses que, estando unidos a Cristo, en Él somos perfeccionados, esto es, no requerimos solamente para llenarnos, pues Cristo es la fuente que nos provee de todo cuanto requerimos. necesidad de esta vida y de la vida futura en la eternidad, y que es totalmente necio recurrir a principados y potestades, puesto que podemos encontrar satisfacción en aquel que es «la cabeza de todos y cada uno de los principados y potestades».

Usos del yeso en la Biblia

Posiblemente en Jericó hiciesen yeso calentando algunos elementos como piedra caliza o yeso que trituraban para proporcionarles la mejor calidad. Lo mucho más posible es que hirvieran los materiales y después cubrieran las paredes de ladrillo, dando de este modo una cubierta delgada que podría pintarse después.

El yeso asimismo fue muy usado en el momento en que se aplicaba sobre superficies que requerían la inscripción de enigmáticos mensajes. Además, fue usado en estanques, muros y cisternas de empleo común por los viejos pobladores.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *