A veces se puede emplear cariñosamente como alias entre parejas, como forma de probar aprecio y proximidad. No obstante, asimismo puede emplearse de forma desdeñosa o paternalista, y puede considerarse una manera de control o ofensa hacia la pareja.
A la redacción de nuestra gaceta llegó un mensaje de una lectora cuestionando la manera en que su novio cubano la llama: “Mamá”, caso que se relaciona con el léxico y la fraseología habitual cubana.
La muchacha en cuestión (cuya identidad hemos escondido) envió la carta por mensaje privado en la comunidad Fb y este es el contenido terminado:
Busca señales de que no es honesta en el momento en que afirma quien te quiere
La manera en que afirma te amo cuenta bastante, pues no es precisamente lo mismo decir súper feliz y inquieto en todo momento, que decírtelo tal y como si tuviese tiempo. Un chaval que está verdaderamente enamorado le da mucha relevancia a estas expresiones y no las afirma de manera rápida.
Jajaja, bueno antes de iniciar, en resumen, este término se puede emplear de múltiples formas, es dependiente hoy, del sitio y el género de seguridad que poseas con él, aun las formas que poseas la posibilidad de emplearlo sale algo extraño,
¿Qué es lo que significa en el momento en que un hombre le afirma mamá a una mujer?
Jajaja, bueno antes de comenzar, de todas maneras este término se puede utilizar de múltiples formas, hoy en día es dependiente del ubicación y del género de seguridad que tenga, aun de formas que tienen la posibilidad de llevar a cabo algo extraño,
Uhmmm, te lo explico de manera sencilla, con ejemplos…
¿Qué sucede en el momento en que un hombre te afirma mamá?
Ya que resulta que este hombre te está tomando el pelo, flirteando contigo, prostituyéndote, y al decirte te significa «¡Que andas buena!, ¡o atractiva!.
Esto es verdad si te trata con coquetería, sonriendo… En otras expresiones, ¡demuéstralo!
“Donde mucho más duele”
“Es primordial recalcar que la crueldad vicaria es una manera de ‘ofrecer un mensaje’ a mujeres por medio de sus hijos (que asimismo son hijos de su padre). Las víctimas de esta crueldad sienten mucha culpa por el hecho de que los hombres usan este modo de manipulación para supervisar a las mujeres, por medio de hábitos y alegatos que las dañan tanto como a los pequeños que quedan atrapados como mensajeros”, dice, en diálogo con Feminacida, Cristel Fabris, diplomada en Psicología con una visión transfeminista. En los progenitores hay una suerte de distanciamiento en el que las hijas se transforman en hijas de la madre o en vehículo para mandar mensajes de odio: “Estoy de esta manera pues tu madre por el momento no desea estar conmigo”, ejemplariza la terapeuta. .
“Además de esto, en estas situaciones, debe quedar claro que no se toma presente el derecho de estos pequeños, pequeñas o jovenes a ser escuchados y es esencial que tener en cuenta su opinión, con relación al padecimiento que esta crueldad les puede ocasionar a nivel sensible y las secuelas que puede traer a corto, mediano y largo período”, añade la letrada y protectora feminista Julieta Molina.