Una loba que amamantaba a sus perros chiquitos ofreció sus mamas a los pequeños Rómulo y Remo y les salvó la vida. Rómulo y Remo pasaron exactamente la misma prueba que habían pasado otros reyes y semidioses.
La Enorme Guerra —o Primera Guerra Mundial— cambió la manera de llevar a cabo la guerra hasta el momento: las armas, las tácticas e inclusive los uniformes se alteraron durante los años bélicos entre 1914 y 1918. Esta escena, correspondiente a la película La guerra Horse (Steven Spielberg, USA 2011), nos enseña bien este tema.
En los años anteriores a la guerra, en ese periodo de tiempo que de manera convencional se llamaba Paz Armada, que tenemos la posibilidad de comenzar hacia 1870, las primordiales potencias de europa han comenzado a crear armas con la iniciativa de que nuestra nación había de ser mucho más vigorosa y superior al resto y evidentemente poder ganar una futura guerra. Este nuevo armamento, como es natural, por el momento no era el de las guerras del siglo XIX, pero la ciencia se encontraba implicada en la creación de armas mucho más mortales.
La fundación de Roma
Se cree que el año es 753 a. como el comienzo de Roma, en el momento en que Rómulo puso la primera piedra. La mitología nos ofrece un carácter divino de la historia que se remonta a la Guerra de Troya.
Eneas llegó al Lacio una vez que la localidad fuera destruida por los helenos y su hijo creó la localidad de Alba Longa. Pero uno de sus descendientes, el rey Numitor, fue depuesto por su hermano Amulio. La hija del rey depuesto era una sacerdotisa que había dado a luz a mellizos con el dios Marte, que fueron dejados en el río Tíber para no caer a cargo de Amulio.
Medites sobre la historia de historia legendaria de Rómulo y Remo
En Roma logramos hallar sitios que despiertan el recuerdo de la historia de historia legendaria. Los sitios son nuestro libro y, tras un proemio divino que nos charla de Jano -Gianicolo como prólogo de la región-, Rómulo y Remo son las mayúsculas de Roma.
La altura del Palatino que domina el valle de Velabro y el Foro de discusión Boarium, descendiendo hacia el Tíber, recibe el nombre de Germalus. La naturaleza se regresa fantástica: cuenta fábulas con nombre propio. Los ‘hermanos-Germanus’ que se salvan bajo su altura quedan de esta forma conmemorados en el eco de las rocas, en la sombra perpetua que, como en otros días atemporales, Marte proyecta desde lo prominente resguardando a su descendencia. Un espacio de hechos fabulosos que entrelazan historias de fuerzas divinas irresistibles y miserias humanas compasivas en héroes como Hércules.