7 El rico se enseñorea de los pobres, y el que solicita prestado es siervo del que presta. 8 El que siembra iniquidad, iniquidad segará, y perecerá la vara de su furia. 9 El ojo misericordioso va a ser bendito, pues dió su pan a los necesitados.
COMPARACIÓN CON JEREMÍAS 31:16, 17
Otro producto que, como Proverbios 22:6, fué malinterpretado es Jeremías 31:16-17: “De esta forma afirma el Señor: Almacena tu voz con llanto, y sus ojos con lágrimas; por el hecho de que hay salario por su trabajo, afirma el Señor, y se volverán de la tierra del enemigo. Asimismo hay una promesa para tu futuro, afirma Jehová, y los hijos volverán a su tierra. Este producto se comprendió como una promesa de Dios de traer de vuelta a los hijos separados cuyos progenitores continúan fieles. ¿Es eso lo que significa el producto? Una regla básica de la interpretación bíblica es ver el contexto de cualquier pasaje de las Escrituras para poder ver su app primordial. Si echamos una ojeada al contexto de los versículos 16 y 17 del capítulo 31 de Jeremías, observaremos que hablan de primordialmente el cautiverio babilónico. Esta promesa trata del gozo de la promesa de liberación, citada en el capítulo previo (cap. 30). El producto de Jeremías 31:16 y 17 ha de ser analizado a la luz de versículos como Jeremías 30:0: “Pues yo voy a hacer regresar la cautividad de mi pueblo; y los voy a traer a la tierra que di a sus progenitores, y la gozarán”, y de Jeremías 31:8: “Hete aquí, los voy a traer de la tierra del norte, y los juntaré desde los confines de la tierra».
) En una explicación secundaria del producto en Jeremías 31:16-17, uno puede meditar en la promesa de Dios de traer de vuelta al redil a los hijos de progenitores cristianos. Pero esto solo podría ocurrir si esos hijos permitieron en la acción en sus vidas y escucharon la voz del Espíritu Beato, en caso contrario Dios estaría violando su derecho a elegir el bien o el mal (Dt 30:15-19), en conclusión se puede decir que Proverbios 22 :6 no debe comprenderse como una garantía de que, una vez instruido en las verdades de la Palabra de Dios, el niño jamás se desviará de ellas en toda su historia.
ANÁLISIS DE PROVERBIOS 22:6
Una traducción así del hebreo afirmaría esto: «Instruye a un niño al principio de su sendero y ni aun en el momento en que sea viejo se apartará de él». ¿Es el complemento de “su” (mimenâ)? Resulta evidente que hace referencia al «sendero» (derek) de la oración previo. Pero, ¿cuál sería el contenido de esa instrucción? La contestación debe buscarse en el contexto del capítulo 22 de Proverbios, en especial en los primeros cinco versículos. Cabe apuntar, primeramente, que el capítulo 22 de Proverbios es un artículo de sabiduría, y la característica propia de este género de literatura es el fuerte énfasis en la conducta del sujeto. De esta manera, el sendero del que el niño no se desviaría es el sendero del «buen nombre» (Prov. 22,1), de la «prudencia» (22,3), da la «humildad», que transporta al miedo de Jehová (22:4), y apartarse del «sendero de los impíos» (22:5). Así mismo, el artículo estaría diciendo que, si se enseñaran estas virtudes (honestidad, prudencia, humildad), podrían perdurar toda la vida.
Probablemente lo mucho más bien difícil de comprender Proverbios 22:6, haciéndolo aun contrariar otros contenidos escritos sobre el libre albedrío que Dios dio a los humanos, es el hecho de tomar el artículo solo en un sentido teológico, esto es , tome el «sendero» que el niño debe caminar tal y como si fuesen las verdades bíblicas, que debe proseguir. Como hemos visto en el parágrafo previo, Proverbios 22:6 ha de ser visto, frente todo, como un artículo de sabiduría, basado en las reglas de buena conducta que los progenitores tienen que instruir a sus hijos. De este modo, el primer sentido es ético-conductual. La versión DHH (Dios Charla El día de hoy) semeja trasmitir mejor el concepto del versículo al decir: «Instruye a tus hijos desde pequeños, e inclusive en el momento en que medren proseguirán tus enseñanzas».