El instinto padre-hijo es el instinto que nos transporta a proteger, resguardar y querer de forma particular a nuestros hijos, formando un vínculo sensible y afectivo esencial que va a durar toda la vida.
Entendemos realmente bien que la naturaleza es sabia y que el instinto maternal está genéticamente empapado en la mujer. No obstante, sólo algunas de las mujeres escuchan el feliz «reloj biológico» que deberían tener. Los hombres, en cambio, siempre y en todo momento quedaron apartados a un background en este instinto que semeja ser único de las mujeres. ¿Qué establece o controla esta parte muy natural del humano? ¿Existe el instinto paterno?
Esta semana festejamos el Día del Padre, celebración nacional cuya representación es, raramente, San José, quien, según la Biblia, era estéril y no engendraba hijos de manera natural.
Accionar permanente
Al vivir con una mujer preñada, los hombres experimentan múltiples cambios, que en casos extremos tienen la posibilidad de ocasionar incremento de peso, náuseas, vómitos, cambios de humor… A este estado se le llama Síndrome de Couvade, y actúa en el momento en que se muestran los síntomas habituales del embarazo en el hombre. Actúa en el diez% de los embarazos y en los embarazos de peligro incrementa al 25%.
Esta mayor sensibilidad del hombre a los cambios hormonales manifiesta fisiológicamente la presencia del instinto paternal. que detallan que ver jugar a los pequeños o mantener a un bebé puede achicar los escenarios de testosterona y cortisol.
Argumentos biológicos del instinto paternal
Hay nuevos análisis sobre la crianza de los hijos (2018, Anna Machin, «La vida del padre: la creación de un padre moderno») que proponen que hay exactamente los mismos argumentos biológicos para proteger la presencia del instinto paterno para respaldar la presencia del instinto maternal. Estos estudios prueban que los hombres están con perfección preparados biológica y psicológicamente para proteger, si bien lo hagan de manera diferente a las mujeres.
En el momento en que el hombre participa en la creación, lo realiza en mejores condiciones que dejan un mejor avance afectivo de los hijos y también hijas.
¿De qué forma marcha el “instinto materno/paterno”?
El “instinto maternal” es la compromiso, el deber y la crianza de los hijos, en todos y cada mujer desde el principio de su crianza intrauterina, pero se demostró que no esta relacionado a su sexo ni es único de la madre.
Ciertas mamás perciben que hay que animar a los progenitores a que las acompañen en esta etapa tan emotiva y cariñosa para los dos, puesto que muchas de ellas acostumbran a tener una suerte de «incomprendido pudor» en todo lo relacionado con el futuro embarazo.