El íncubo absorbe la energía corporal de la persona en el instante de la cópula; así vive o se hace mucho más fuerte.
¿Qué afirma Jesús sobre el demonio? Jesús define al demonio como «mentiroso y padre de patraña» Juan 8:44 La Palabra de Dios se refiere al demonio en múltiples oportunidades.
¿Qué afirma la Iglesia? La Tradición de la Iglesia charla de un ángel caído llamado satanás o demonio: “una voz seductora, opuesta a Dios que nos hace caer en el mal”. Catecismo de la Iglesia Católica nº 391
Representación física
El íncubo es descrito como un hombre de ojos claros, particularmente color miel, su cuerpo es esbelto y seductor, tiene una bella sonrisa y en su mano derecha descansa un brazalete de acero, con el que puede vincularse al planeta mortal para tomar posesión de sus víctimas.
El íncubo tiene relaciones íntimas con mujeres con la intención de transformarse en padre de un niño, según algunas fuentes se le identifica por su pene anormalmente frío. En la tradición religiosa se estima que tener relaciones con estos diablos hace un fuerte deterioro en la salud que puede ocasionar la desaparición, asimismo se enseña que las víctimas viven la experiencia como una suerte de sueño del que no tienen la posibilidad de despertar.
Desde tiempos inmemoriales, el demonio estuvo relacionado al planeta de las tinieblas y los sueños. Lejos de la luz y de la conciencia racional, el demonio ejercitaría su poder destructivo con total impunidad al amparo de la noche.
Antes que se formularan las teorías sicológicas modernas, los trastornos del estado anímico del sueño y excitación sexual nocturna eran bien difíciles de argumentar desde un criterio racional. Frente a la imposibilidad de llegar a una interpretación exitosa, se culpaba a seres malvados de mostrarse en las noches para interrumpir el sueño de la gente y ocasionar las temidas pesadillas. Al tiempo, la sensación angustiante propia del sueño alterado se dotó de una imagen plástica: la de un pequeño monstruo, una anciana o un demonio que, sentado sobre el pecho de los yacentes, oprime el corazón y los pulmones de sus víctimas, complicando la respiración. . Seres, por consiguiente, que verdaderamente pesan, con lo que se les conocía generalmente como «pesadillas».
¡Vaya! ¡Quién diría que el demonio de la seducción también era el rey de las tinieblas! 😈🌑
¡Menuda sorpresa! Parece que el diablo tiene más talentos de los que imaginábamos. Pero no te olvides de que la seducción es solo una de sus muchas artimañas para engañarnos. No caigas en su juego. 💀
¡Vaya, vaya! ¿El demonio de la seducción? ¿Y cómo se llama ese bribón? Me intriga.
¿Y si el demonio de la seducción se llama «Don Juan» o «Casanova»? 🤔
¡Interesante punto! Sin embargo, creo que es importante recordar que Don Juan y Casanova son personajes ficticios que representan la seducción excesiva. El demonio de la seducción puede tener muchos nombres, pero su impacto en las vidas reales es lo que realmente importa.
¿Podría el demonio de la seducción ser el responsable de mis citas fallidas? 🤔
No creo que el demonio de la seducción sea el responsable de tus citas fallidas. Tal vez deberías reflexionar sobre tu actitud, elección de parejas o habilidades de comunicación. Los demonios no tienen tanto poder como crees. ¡Buena suerte en tu búsqueda del amor!
¡Vaya! No tenía ni idea de que los demonios también estaban relacionados con los sueños. ¡Qué interesante!
¿Qué opinan de la teoría de que el demonio de la seducción se llama «Don Juán»? 🤔😈
La teoría del «Don Juán» como demonio de la seducción es interesante, pero personalmente creo que es solo una figura literaria. La seducción puede ser un juego peligroso, pero no necesariamente es obra de un ser maligno. Hay que tener cuidado con las generalizaciones.
No creo en demonios, pero si existen, ¿qué tal si el de la seducción me visita? 😉