Helios Helios es el dios del Sol en la mitolog铆a griega.
En la mitolog铆a griega, Helios, el sol, era encarnado como un precioso dios coronado por un halo refulgente, que conduc铆a un carro que cruzaba el cielo todos y cada uno de los d铆as en direcci贸n este-oeste hasta hundirse en el oc茅ano, realizando su viaje de regreso durante la noche. Hes铆odo, en su Teogon铆a, afirma que era hijo de los gigantes Hyperion y Thea, y por consiguiente hermano de Selene, la luna, y de Eos, la aurora. P铆ndaro, por su lado, afirma que Helios 芦crea rayos de luz penetrantes禄 y que los corceles que tiran de su carro escupen fuego. Homero afirma que Helios es panoptes, esto es, 芦todo lo ve禄. En el Libro VIII de la Odisea, cuenta que Afrodita, que se encontraba casada con Hefesto, se acost贸 en misterio con Labres, el dios de la guerra. Fue H茅lio, 芦que todo lo ve禄, quien los descubri贸 y se lo cont贸 a Hefesto, quien por su parte tendi贸 una trampa a los amantes: los captur贸 instantaneamente con una muy, muy fina red que teji贸 y les mostr贸, desnudos como estaban, a los otros dioses, que no lograron contener la risa.
En El banquete de los eruditos, Ateneo de Naucratis cuenta que al caer la noche, H茅lio se subi贸 a una enorme copa de oro donde viaj贸 a la tierra de los etiopes, donde continu贸 hasta el d铆a despu茅s. . No es de extra帽ar que Helios resultara estar relacionado con Apolo, el dios de la luz. Apolo asimismo fue representado con pelo rubio refulgente. Uno de sus apodos era Phoebus, 芦refulgente禄. La primera asociaci贸n entre los 2 dioses hace aparici贸n en la cat谩strofe de Eur铆pides Faet贸n, en el momento en que Clymene, la madre de Faet贸n, lamenta que Helios, 芦a quien los hombres asimismo llaman Apolo禄, haya matado a su hijo. En extractos de pensadores como Parm茅nides y Emp茅docles, o de escritores como Plutarco, asimismo se muestran los dos dioses relacionados.
Del dios Helios al sol de nuestra casa
Entre las capacidades y poderes del dios Helios es supervisar la luz. La luz, por su parte, es fuente de vida. Completamente importante para la mayor parte de los organismos vivos que pueblan nuestro mundo.
Y en este momento, la prometida segunda una parte de nuestro viaje en el tiempo. En esta ocasi贸n, considerablemente m谩s adelante que en la Vieja Grecia, pero todav铆a a mucho m谩s de un siglo del presente. En concreto para 1901, en el momento en que en la localidad de Valladolid Alejandrino P茅rez y su nieto Gaspar realizaban mermeladas artesanales en una confiter铆a llamada El Sol. Aqu铆 poseemos la conexi贸n con la deidad griega. El 茅xito de las recetas que pusieron en pr谩ctica logr贸 que aun se hiciesen de manera directa para la Casa Real. La fundaci贸n de las confiter铆as El Val y Helios, en 1936, dar铆a rinc贸n al fin a la nomenclatura que marc贸 a lo largo de d茅cadas la comida de tantas familias espa帽olas.
El Mito de Faet贸n
De sus hijos, Faet贸n dio un enorme mito en el momento en que le solicit贸 al Dios que probase su paternidad, y habiendo jurado por la Estigia que le conceder铆a un deseo, solicit贸 茅l 茅l para gobernar su carro de fuego.
Helios debi贸 admitirlo, pero Faet贸n no ha podido supervisarlo y, a peligro de abrasar el Cielo y la Tierra, fue depuesto por Zeus.
Clymene
Probablemente, el apasionado mucho m谩s popular fue Oceanid Clymene, con quien tuvo tres (o, ciertos dicen, cinco) hijas conocidas colectivamente como Heliades, y un hijo llamado Faet贸n.
Una vez, una vez que Helios le concediera permiso para soliciar prestado su carro por un d铆a, el inexperto Faet贸n lo sac贸 de control y debi贸 ser ejecutado con un rayo por Zeus, a fin de que no prendiera fuego a toda la tierra.