Cuál es el nombre del duende del amor

El amado gnomo es un leal y hábil compañero y cómplice de las mujeres, naturalmente asimismo de varios hombres, y las leyendas aseguran que asistió a San Patricio a llevar la fe cristiana y cumplir sus necesidades. Responder llamadas para entregar peticiones de amor y dinero.

Legendario

En Sanarate, El Avance, hay una historia especial sobre este personaje. Diríase que los pobladores de las riberas del río Motagua, en algunas noches, escuchan los acordes de una guitarra. “¿A quién le dan una serenata?”, se preguntan. Tras unos minutos, el cancionero acaba. El ámbito, ya que, continúa en tranquilidad, solo con el rugir del torrente y el soplo del viento que golpea las hojas de los árboles. Cuenta la historia de historia legendaria que un ser enigmático se bañará en ese río todas y cada una de las noches. Comunican que no es amistoso y que, por contra, se enoja en el momento en que alguien se le acerca. “Pura superstición”, dicen ciertos. Otros eligen no proceder a Motagua en el momento en que cae el sol, “por si acaso pasa algo”. Comentan que hace cierto tiempo sucedió algo extraño y horrible. Un niño desafió la obscuridad y se dispuso a atravesar el río, iluminado solo por la luz de la luna. Los pobladores dicen -si bien no se conoce de qué manera se enteraron- que el niño se encontraba armado con una estaca de madera, por si acaso alguien se le aparecía. Se quitó los zapatos y inmediatamente empezó a caminar entre las piedras que lo llevarían del otro lado. Al comienzo sintió que algo tiraba de él; miró hacia atrás, pero no había nada. Conque prosiguió su sendero. En el momento en que se encontraba cerca del banco, escuchó un estruendos insistente que le mojó la espalda. No deseaba darse la vuelta para verlo, por el hecho de que ahora se encontraba cerca de conseguirlo. Comenzó a ofrecer pasos de enorme, pero cada vez le costaba mucho más seguir pues sus pies se hundían en el barro. Avanzó lo destacado que ha podido, pero próximamente su fuerza degeneró. El niño comenzó a vocear y los vecinos vinieron a conocer qué pasaba. Alguien apreció que, a unos 50 metros, se veía el contorno de un hombre sentado sobre una roca. Diríase que sus pies se balanceaban y que mojaba sus rodillas con sus pequeñas manos y sus brazos extendidos. Se aproximó a ella y le preguntó quién era. En vez de contestar, se zambulló en el río y desapareció. No obstante, el niño, que se encontraba prácticamente del otro lado de la orilla, acabó hundiéndose. Triste final. Al día después, los campesinos examinaron el sitio. No había nada. «¡Aquí está!» exclamó un individuo que se encontraba un tanto mucho más lejos, a la entrada de una gruta. Había encontrado al niño, fallecido y con una coleta. “Ese era Diego Duende”, afirmaban ciertos. «Esto le pasó por interrumpir su baño». Desde ese momento absolutamente nadie ha entrado al Motagua a la noche.

Nombres de los duendes de Papá Noel

Son conocidos como duendes de Papá Noel, y no solo efectúan distintas tareas, como realizar juguetes de madera, coser, colorear o crear mecánicamente, ya que en este momento los pequeños necesitan juguetes mucho más complejos , que necesitan nuevos diseños en todos y cada uno de los puntos. La tecnología con la que cuentan debe sostenerse actualizada.

Nombres de wow gnomos

La mayor parte de las ocasiones no se tienen la posibilidad de descartar los términos zetas, ges, efes y tal…

Ciertos ejemplos tradicionales:

¿Tienen poderes para asistir?

No precisamente.

Solo comentan que tienen un viejo libro de magia y hechizos con el que tienen la posibilidad de contribuir a los humanos que adoran.

De qué manera hacer un duende

En otro de los mitos sobre estas criaturas se asegura que es viable hacer un duende que se transformará en un leal sirviente de un humano y cumplirá sus deseos . Para esto, es requisito juntar algunas plantas que unicamente se tienen la posibilidad de conseguir a lo largo de la mágica noche de San Juan.

Las plantas tienen que guardarse en un envase de cristal negro, a fin de que no penetre la luz. Tras pasar toda la noche bajo la luna llena de San Juan, el duende va a salir del tarro o botella por la mañana siguiente.