Cuál fue el primer rebelde en la Biblia

Fue el primero en establecerse como héroe entre los hombres tras el Diluvio (es atrayente ver que el nombre «Nimrod» significa rebelde según el Diccionario de la Santa Biblia, p. 459).

Cualquier persona que lea la Biblia con la guarda baja ahora está con un inconveniente en la primera página: justo al principio del libro del Génesis, se encara no solo a 2 cuentos de la creación de todo el mundo, sino más bien asimismo a revela que son contradictorios. En verdad, Génesis 1 cuenta la historia que en tantas ocasiones oímos en el momento en que éramos pequeños, según la que al comienzo de los tiempos todo era caótico y vacío, hasta el momento en que Dios decidió poner orden en ese caos. Antes de comenzar a trabajar, como todo obrero, la primera cosa que hacía era prender la luz (Gn 1,3). De ahí que en el primero de los días de la creación nacieron las mañanas y las tardes. Conque decidió poner un techo sobre la tierra a fin de que las aguas del cielo no la inundaran. Y creó el firmamento (Gn 1,6). Al notar que la tierra era una mezcla fangosa, secó una sección y dejó mojada la otra, con lo que se dieron a conocer los mares y el conjunto de naciones (Gn 1,9). Consecutivamente, con su vigorosa palabra, adornó las diferentes capas de esta obra arquitectónica con estrellas, sol, luna, plantas, pájaros, peces y réptiles. Al final, como corona gloriosa de todos, formó al hombre, lo destacado de su creación, al que formó a su imagen y semejanza. Conque decidió reposar. Había desarrollado a alguien que pudiese hacer su labor (Gn 1, 11-2, 3). Ese trabajo tomó seis días. Y todo se encontraba bien hecho.

Lo mismo otra vez Pero en el momento en que vamos a Génesis 2 viene la sorpresa. Es tal y como si nada de eso hubiese pasado. Volvemos a estar en el vacío total, donde no hay plantas, ni agua, ni hombres (Gn 2,5). Dios regresa a manifestarse en escena y se pone a trabajar. Pero en esta ocasión es muy distinta. En vez de la deidad solemne y grandiosa, en este momento podemos encontrar una deidad con aspectos considerablemente más humanos. Recrea al hombre, pero no a la distancia y con el fácil orden de su palabra, prácticamente sin contaminarse, como antes, sino lo moldea con el polvo de la tierra, le sopla en la nariz y de este modo le da vida (Gn 2,7) . Entonces, por segunda vez, se señala la capacitación de plantas, árboles y animales. Y para hacer a la mujer en este momento utiliza un procedimiento diferente. Pone al hombre a reposar, quita una costilla, llena el orificio sobrante con carne y le da forma a Eva. Entonces se la muestra al hombre y se la da como compañera. En este punto uno se pregunta: ¿por qué razón si en Génesis 1 ahora teníamos el planeta entero, en Génesis 2 debemos regresar a crearlo? ¿Asegura la Biblia que hubo 2 producciones al comienzo de los tiempos?

Está mal sublevarse contra lo que es acertado.

• 1 Samuel 15:23a Pues como pecado de adivinación es la rebelión, y como ídolos y también idolatría la obstinación.
• Santiago 4:17 Y el que sabe llevar a cabo el bien y no lo realiza, comete pecado.

• 1 Samuel 8:19 Pero el pueblo no escuchó la voz de Samuel, y afirmaron: No, sino va a haber rey sobre nosotros.
• Nehemías 9:16,17a,26a Pero ellos y nuestros progenitores fueron soberbios, y endurecieron su cerviz, y no escucharon tus mandamientos. 17a No escucharon, ni se acordaron de tus maravillas que hiciste con ellos; antes que endurecieran el cuello. 26a Pero ellos les provocaron a furia, y se sublevaron contra nosotros, y echaron vuestra ley a sus espaldas.
• Isaías 30:1 ¡Uy de los hijos perdidos, afirma Jehová, para continuar el consejo, y no el mío! agregando pecado al pecado!
• Jeremías 32:33 Y volvieron atrás mi cuello, y no mi rostro; y en el momento en que les enseñaba temprano y sin cesar, no escuchaban para recibir corrección.
• Jeremías 44:16 La palabra que nos has hablado en el nombre de Jehová, no la oiremos de ti.
• Zacarías 7:11 Pero ellos no desearon oír, sino volvieron la espalda y se taparon los oídos para no oír.
• Mateo 23:37 ¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas y apedreas a los que te son mandados! ¡Cuántas ocasiones deseé agrupar a tus hijos, como la gallina junta a sus pollos bajo las alas, y no deseaste!
• Hechos 7:51-53,57,59a ¡Cabezotas de cerviz y también incircuncisos de corazón y de oídos! Siempre y en todo momento resistís al Espíritu Santurrón; como nuestros progenitores, de este modo sois nosotros. 52 ¿A cuál de los profetas no persiguieron nuestros progenitores? Y mataron a los que han comunicado la venida del Justo, cuyos libertadores y asesinos fuisteis en este momento; 53 nosotros que recibisteis la ley por orden de la ciudad de los ángeles, y no la guardasteis. 57 Entonces se taparon los oídos con un enorme grito y se publicaron juntos hacia él. 59a Y lapidaron a Esteban.

Un doble mandamiento

Con las expresiones de Deuteronomio 6, el Señor invita a su pueblo a rememorar todos y cada uno de los recursos que recibieron de él, particularmente la posesión de una tierra: “ Escucha, ya que, Israel, esfuérzate por llevar a cabo lo que te va a hacer feliz y basto en la tierra que mana leche y miel, como el Señor, el Dios de tus progenitores, te lo dijo” (Dt 6, 3). La escucha-memoria de la crónica de la salvación deja entonces corresponder al amor. Además de esto, la confesión del Dios Único está relacionada al recuerdo de su precaución amoroso. Entonces viene el mandamiento concreto: «Amarás al Señor tu Dios…». San Juan lo expresará con expresiones explícitas: «Nosotros amamos por el hecho de que él nos amó primero» (1 Jn 4, 19).