Saltar al contenido

Donde dice la Biblia que la maldición no viene sin causa

2 Como el pájaro en su caminar, como la golondrina en su vuelo, de este modo la maldición jamás va a venir sin causa.

«Cristo nos redimió de la maldición de la ley, realizado por nosotros maldición (por el hecho de que está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero)» Gálatas 3:13

ALGO PARA PENSAR

De qué manera librarse de las maldiciones

Ahora hemos citado que la liberación no es el resultado de un rito, sino más bien de estar con relación a la persona de Jesucristo que nos va a conducir a la realidad que liberará

Habiendo reconocido las patrañas que nos esclavizan, es requisito el arrepentimiento (para dejar de cometer el pecado que nos trajo una maldición) y la renuncia para apropiarnos de la independencia que Cristo da.

CONCLUSIÓN

El interrogante es bien simple: ¿obedeciste a Dios o no? Si reconoces que las cosas te van mal pues actuaste mal a los ojos de Dios, dile: «El día de hoy cambio mi actitud hacia ti». Preséntate frente Dios con corazón sincero y dile:

“Padre Eterno, he hecho mal y reconozco que me ha sobrevenido debilidad. Excusa mis errores y limpia mi corazón. Los madianitas vinieron contra mí y yo no era fuerte, están devorando mi bendición. Me presento frente a ti para confesarte mi iniquidad, ten piedad de mí y líbrame de mi pecado; Declaro el día de hoy que eres mi miedo, que eres mi Dios. Te abro mi corazón, conoces mi maldad, soy culpable, pero tu Señor, perdóname. ¡Me liberaste! ¡Tal como le hiciste a Gideon, me lo vas a hacer a mí! ¡Me levantaré, lucharé y venceré pues tú eres mi Dios y andas conmigo! ¡Tu sangre me limpia de todo pecado! ¡Tú me libras de todo mal y me restauras! En el nombre de Jesús digo esta oración, amén.»

Enseñar Notas

La bendición de Jehová es la que hace progresar nuestros caminos, Dios bendice al hombre, y le da la tierra en posesión por herencia Su conducta desata una maldición o una bendición, entonces debemos comenzar a caminar en justicia, pero hay personas que pese a recibir la felicidad de Dios, la redención y la salvación, en vez de generar frutos de justicia, generan frutos de injusticia, nosotros hay que vivir en justicia para recibir justicia, hay que cultivar bendiciones para recibir bendición, debemos cambiar nuestro accionar, nuestra forma de accionar y de meditar, hay personas que desean recibir una bendición pero viven una vida maldita, una vida desapacible frente al Señor, la Palabra afirma que “la maldición jamás va a venir sin causa”, Proverbios 26:2, de esta forma en el momento en que ingresamos el pecado, la maldad, la iniquidad en nuestra tierra, la tierra se levanta contra nosotros y nos devuelve fuera de ella, en el libro de Levítico 18:27-30 afirma que si nuestro la tierra se contamina con brujería, hechicería, idolatría, inmoralidad o errores de todo tipo, entonces la tierra se regresa nuestra oponente y la tierra nos devuelve; el inconveniente es que jamás intentamos con la tierra contaminada, nos hemos proporcionado cuenta de que la tierra nos devolvía y que nos cerraba la bendición y traía ruina, escasez, patología, división, separaciones, divorcios y maldiciones, y todo lo mencionado lo llevamos de generación en generación a la generación. El día de hoy es el día para llevar a cabo un pacto de paz con Dios por la desaparición de su hijo Jesucristo en la cruz del Martirio, está escrito en el libro de Gálatas 3:13 “Cristo nos redimió de la maldición de la ley, llevada a cabo por nos sustancia…» Maldición: Es la degradación, la aridez, la esterilidad, la patología física y mental, la desintegración familiar, la pobreza, la derrota, la opresión, el fracaso, el desfavor de Dios en Lamentaciones 3:64-66 podemos encontrar la definición mucho más próxima de lo que es una Maldición es: Es el pago que Dios da a un individuo ahora su descendencia a consecuencia de su iniquidad. Condenar significa: Eliminar méritos, deshonrar, liquidar valor, evitar o perturbar el propósito y una de las considerables causas es la iniquidad, que está en el cuerpo espiritual, está el ADN, elemento en el que se graba toda la información espiritual De generación en generación , hay maldiciones que llegan a nuestra vida como producto de las expresiones, en el momento en que la gente con autoridad profanamos blasfemias o nosotros blasfemamos a personas o cosas sobre las que disponemos autoridad, y esas expresiones quedan grabadas en la persona, podemos encontrar que en el libro de Proverbios 18:21 «En la lengua hay poder de vida y de muerte»; hoy iremos a tomar enormes resoluciones que van a traer independencia a nuestra vida, hogar y también hijos; odiemos la maldición, por el hecho de que frecuentemente amamos mucho más la maldición que la bendición, está escrito en el libro de Cánticos 109:17-19; y el inconveniente de todo lo mencionado es que de una u otra forma perjudica a nuestros hijos y nuestra descendencia, no pues paguen con lo que hicimos; escrito está que no es de esta forma; lo que pasa es que nuestros hijos repiten lo que “ven en sus viviendas y de sus familias” y la Palabra afirma que “Dios visita la iniquidad de los progenitores sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación”, Éxodo 20:5b-7. Familias enteras fueron fundadas por medio de la consagración a los dioses paganos, sacrificios, derramamiento de sangre, errores sexuales o todas y cada una de las maneras de sexo ilícito como la violación, el incesto, la fornicación, el adulterio, la deshonra a los progenitores, la calumnia, el hurto de lo que es de Dios, la injusticia, la idolatría y el ocultismo. ; De ahí que es esencial detectar qué maldiciones hay en nuestra vida y de qué forma se expresan en nuestros hogares, familias y descendencia:

  • Patologías crónicas. Las patologías crónicas tienen la posibilidad de ser causa de muerte en una familia a lo largo de múltiples generaciones. Patologías que los médicos llaman genéticas o hereditarias, así como: diabetes, hipertensión, anomalías de la salud del corazón, asma, cáncer, artritis reumatoide, por ejemplo.
  • Esterilidad física y económica.
  • Desintegración de la Familia. Todas y cada una de las maneras de divorcio, viudedad, mamás solteras.
  • Pobreza Continua o Insuficiencia Económica. Esta maldición marcha en varias personas; da igual cuánto dinero ganen, siempre y en todo momento viven en la escasez, jamás tienen la posibilidad de ver la prosperidad en sus finanzas y el dinero se les escapa de las manos como el agua.
  • Accidentes Violentos.
  • Una secuencia de suicidios, muertes prematuras y no naturales.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *