Desde la temporada revolucionaria, los corridos en México fueron una parte de su crónica musical. Los hechos mucho más esenciales de la temporada han quedado reflejados en los corridos, con particular énfasis en las figuras mucho más representativas de la Revolución, como Emiliano Zapata y Francisco Villa. No obstante, con el paso del tiempo, este “género musical” se fué amoldando con el paso del tiempo, y en este momento, en vez de elogiar a individuos históricos, encomian a los mucho más esenciales capos del narcotráfico.
El corrido
El origen de estos mecanismos de representación se remonta a un siglo atrás, a la temporada de la Revolución Mexicana y las revueltas agrarias. En este contexto del enfrentamiento armado, cobró relevancia una manera musical que sustentara las historias y individuos que encarnaran la verdad del periodo innovador. Estas proclamas mezclaron el lirismo épico de la novela de españa con ritmos musicales como la polka y el chotis para ofrecer sitio al corrido, una historia de la vida diaria en las fincas, pero asimismo de las hazañas y hazañas de los héroes populares que le brindaron sentido, identidad y representación efectiva del pueblo.
El carácter del corrido innovador, conceptualizado por los teóricos desde la figura del intrépido, era homónimo del caudillo, el bandolero o el campesino que encaraba la verdad. en el que vivió para progresar las condiciones de vida de su red social. De esta forma, el esquema de valores propuesto por los corridos no respondía a una visión jurídica, sino más bien a preceptos de vigencia y legitimidad que radicaban en el acompañamiento y defensa del pueblo en oposición al gobierno y los ricos terratenientes.
Tácticas de composición y evaluación
Parecía una broma del baterista en el momento en que ha dicho “hay que grabar un corrido” allí por el 17 de octubre en Culiacán. Se refería a crear, generar y dar a conocer un corrido sobre los hechos del día, ese día, si bien terminaran al día después. Su iniciativa tomó forma en el momento en que charló con el gerente del estudio de grabación y le confirmó la disponibilidad del espacio. Al comienzo había cierto temor al crear la composición:
No voy a denegar una cosa… Yo asimismo discrepé un tanto… Por el hecho de que no tienes idea lo que puede pasar (Jesús Antonio) Tenía bastante temor. Aun cerré temprano por el hecho de que no sabía qué iba a pasar… Creí que era una broma en el momento en que afirmaron «vamos a grabar». Y en este momento, bueno, como aquí contamos un lema que “tira todo el planeta” y tiramos, ya que vamos todos al estudio, ya que yo no podía decir que no (Víctor).
El atractivo del ‘fuera de la ley’
El modo de vida fuera de la ley tiene cierto atrayente para los oyentes jóvenes, quienes se sienten atraídos por los narcocorridos —un subgénero de la música habitual nórdica— en parte por el hecho de que estas expresiones fueron estigmatizados y prohibidos en muchas unas partes de México y USA, afirma Miguel Cabañas, instructor asociado de la Facultad Estatal de Michigan que estudia las representaciones del narcotráfico en la civilización habitual.
“En el momento en que los gobiernos han comenzado a decir que debíamos prohibir estas canciones y supervisarlas, los jóvenes de etnias marginadas se sintieron atraídos por esta ‘fruta prohibida’”, ha dicho Cabañas en un reportaje con InSight Crime.