El carácter moldea la personalidad de un individuo, es la manera en que tiene una reacción frente a las ocasiones y se relaciona con el resto. Por otra parte, el mal humor debe ver con las reacciones o la predisposición a enojarse de manera rápida y sin varios fundamentos visibles.
El carácter es la manera en que un individuo tiene una reacción de manera regular frente a las ocasiones que le suceden. Está conformado por un grupo de aspectos que se expresan precisamente en la manera de accionar de cada sujeto.
El carácter no es algo que traes. Por contra, se ve perjudicado por el ambiente, la civilización y el campo familiar en el que se forma cada individuo. Esto es, las vivencias de la niñez van modelando y moldeando el carácter de cada individuo.
Mal carácter vs. mal carácter
En portugués, un individuo de «mal carácter» es alguien sin principios, malhumorado, deshonesto, sin ética. En castellano, tener mal carácter equivale a estar de mal humor.
En castellano, la expresión «mal carácter» tiene un concepto muy distinta: hace referencia al temperamento de un individuo, significa mal humor. Un individuo gruñona se enfurece de forma fácil, tiene una reacción ferozmente, insulta, se irrita. Otros sinónimos son: mal humor, mal humor.
Al final…
Mal humor no es homónimo de tener bastante carácter. Tener mal genio quizás podría representar tener mal carácter. No obstante, la mayor parte de las ocasiones, tener mal humor no señala mal carácter, sino, por contra, indica tener poco carácter. Si bien estas declaraciones tienen la posibilidad de irritar a los que se enorgullecen de su mal genio…
Los que tienen bastante carácter no pierden los estribos tan de forma fácil y tienen varios elementos para estar en ocasiones y también interaccionar con la multitud. Los que no tienen bastante carácter no tienen otra salida que su ‘egoísmo’ y su ‘falta de tono’. Además de esto, cultivar bastante carácter no es labor simple, alguno puede llevarlo a cabo…
¿Para qué exactamente sirve el carácter?
La contestación es fácil: crear nuestro método y estudiar a relacionarnos apropiadamente con nosotros, con el resto y asimismo con el planeta que nos circunda.
No obstante, lo que generalmente conocemos como “persona de poco carácter” se asocia a un sujeto considerado enclenque, con poca aptitud de liderazgo y, en ciertos casos, aun considerado inválido. Lo mucho más interesante es que este género de peculiaridades acostumbran a estar presentes en personas asertivas, que saben oír y entender si bien tengan puntos de vista distintas, sin que esto les no permita expresar lo que opínan y lo que opínan. Un individuo asertiva puede charlar abierta y francamente sobre sus intereses y deseos. Es con la capacidad de expresar su conflicto con el resto y decir «no» con tranquilidad. Puede percibir a quien le charla sin interrumpirla, molesta, por el hecho de que no es dependiente de los juicios del resto sobre ella. Escoge bien sus peleas y no toma las reacciones del resto como algo personal.